El Laboratorio de Calibración del Centro Tecnológico del Metal cuenta con la acreditación ENAC (138/LC10.098) en el área de masa, para la calibración de pesas, básculas, balanzas, tolvas, ganchos… y demás instrumentos de pesaje no automático.
Además cuenta con la designación como Organismo de Verificación Autorizado (08-OV-0015) para realizar el control metrológico para verificación periódica y tras reparación de los instrumentos de pesaje no automático.
Nuestra acreditación ENAC cubre el rango hasta 1000 kg en masas y hasta 63000 kg en instrumentos de pesaje. Puede consultar nuestro alcance detallado en www.enac.es
Alcance del laboratorio
Equipos que calibramos
Instrumentos de pesaje de funcionamiento no automático:
La masa es la magnitud que indica la cantidad de materia que posee un cuerpo determinada por la aceleración producida por una fuerza que actúa sobre él. Su unidad en el Sistema Internacional de Unidades es el kg
Otra cosa distinta es el peso, que representa la fuerza con que es atraído un cuerpo por efecto de la gravedad, y cuya unidad en el Sistema Internacional de Unidades es el Newton.
Las pesas patrón tienen distintas especificaciones, en base a errores máximos permisibles, construcción, forma, diseño, características de los materiales, marcado, presentación, densidad de los materiales…
La clasificación más común de las pesas es la recogida en OIML R 111: E1, E2, F1, F2, M1, M1-2, M2, M2-3 y M3
Un instrumento de pesaje es un instrumento de medida que sirve para determinar la masa de un cuerpo, utilizando la acción de la gravedad sobre dicho cuerpo.
En base al modo de funcionamiento distinguimos:
La calibración consiste en comparar los valores indicados por el instrumento a calibrar con los valores de las masas patrón empleadas, en condiciones especificadas y con un método definido, que tenga en cuenta la influencia de distintos factores que afectan a la lectura del equipo a calibrar. La calibración se lleva a cabo de forma controlada y documentada.
La calibración permite asegurar la fiabilidad de las mediciones de los equipos calibrados, y garantizar el funcionamiento adecuado en las instalaciones y procesos donde se emplean, contribuyendo a incrementar la calidad.
El resultado de la calibración se recoge en un Certificado de Calibración, donde se indicarán los valores de corrección a aplicar en distintos puntos de calibración considerados, así como la incertidumbre de dichas medidas.